No te equivoques: esto no soy yo con una trucha

Bueno, ya sabéis que esto no soy yo, jeje. 

Es una imagen que se me parece mucho. Fue captada en una fracción de segundo de mi ya larga vida. Compartimos todos ese segundo y todos los que forman los 50 minutos de hace ya varios jueves.

Recordad que la imagen está tomada durante un posado en plan fotocol, en el que hice un poco el tonto para que vosotros hicierais de fotógraf@s list@s y despiert@s.

Se trata de una captura del vídeo que realizó Reme.  Reme había adoptado un punto de vista particular y desde allí había elegido un encuadre determinado para las varias tomas que hizo.

Después yo revisé las tomas (Enhorabuena, Reme, muy bien encuadradas) y seleccione uno entre los miles de fotogramas -en cada segundo de grabación hay 25 fotogramas).

No me quedé ahí, sino que hice mi propio re-encuadre, seleccionado una parte del fotograma seleccionado. Era uno próximo a este (he tenido que buscarlo de nuevo): 

Esta imagen tiene un formato horizontal.

Yo buscaba una imagen para mi perfil en Twitter y Google, y había decidido seleccionar una de las que me habíais hecho vosotros con la (imagen de) trucha. Pero, claro, como no me habíais mandado ninguna,  tuve que recurrir al vídeo de Reme. 

Bien, ya tenía la imagen que quería. Vosotros, que vivisteis ese momento, sabíais que estaba hablando de la relación entre la imagen y la realidad que representa. Pero,... ¿y un espectador que no lo supiera? Podría interpretar la imagen de muchas formas: alguien explicando en biología cómo es una trucha; hablando a empresarios de la calidad de sus truchas; hablando en un club de pesca, en una reunión de gastronomía, etc, etc.

Tenía dos recursos para que el espectador la interpretara, la leyera, como a mí me interesaba: 

1. Poner un pie de foto que "anclara", fijara, la lectura. Algo así como "Explicando la relación entre imagen y realidad" 
2. Incorporar dentro de la imagen un globo de diálogo que hiciera más directo y atractivo el mensaje.

Esto segundo fue lo que elegí. Con un sencillo editor de imágenes incorporé el globo de diálogo y el texto que veis. Elegí un color que armonizara con los de la escena sin destacar demasiado.

La segunda imagen de arriba fue el resultado. La subí enseguida a mis perfiles. Pero pronto ví que las condiciones de luz en el aula no eran las más adecuadas y había salido una imagen apagada, gris, tristona,...

Decidí cambiarla enseguida. En el mismo editor de imágenes que tenía (similar a los que tenéis vosotros en vuestras cámaras) jugué con la luz, el color y el contraste haciendo varias pruebas. El resultado es el que figura ahora en mi perfil. Podía haber quedado mejor, claro, pero para mí fue suficiente.

Procedencia: Pixabay. Imagen CC0

¿A qué viene tanto rollo?

Pues sencillamente, a que veamos entre todos las enormes posibilidades que tenemos a nuestro alcance para manipular una imagen hasta obtener el resultado que buscamos.

Pensad ahora en la TV que veis, en las fotos de vuestros ídolos, en todas las imágenes que vemos sin estar presentes en el momento de la toma...

Esta es la idea:

LA IMAGEN NO ES LA REALIDAD, SINO UNA RE-CONSTRUCCIÓN, UNA INTERPRETACIÓN PARTICULAR DE LA MISMA.

SI SOMOS CAPACES DE INCORPORAR ESTE FILTRO A NUESTRA MIRADA, 

SEREMOS UN POCO MÁS LIBRES Y UN POCO MENOS MANIPULABLES.

Procedencia. Imagen CC0

TAREAS QUE OS PROPONGO

1. Dejar aquí un comentario. Hace mucho frío en las entradas sin comentarios. Parece que nadie te lee.
2. Mandarme por correo las fotos pendientes del fotocol (entre 1 y 3)
3. Terminar de poner en marcha vuestros blogs.
4. Después de la entrada de presentación, añadir otra con vuestras fotos (entre 1 y 3), comentándolas lo más y mejor posible.
5. Enviarme un correo con la dirección de vuestro blog para poder verlo, saludaros y comentarlo.

Procedencia. Imagen CC0

ÚLTIMA HORA

HE RECIBIDO 3 FOTOS DE IRENE, LA PRIMERA.

LAS COMENTO EN LA SIGUIENTE ENTRADA.

ESPERO LAS DE TODOS